Cada diente es fundamental para tu sonrisa y tu salud.

Cuando falta uno o varios, no solo se pierde estética, también aparecen problemas como dificultad para masticar, desplazamiento de los dientes vecinos, desgaste prematuro e incluso pérdida de hueso y encía en la zona afectada.

Por eso, rehabilitar los dientes ausentes —ya sea con opciones removibles o fijas como prótesis o implantes— es clave para:

Recuperar la función masticatoria y hablar con naturalidad.

● Mantener la estructura y alineación de tus dientes.
● Evitar que los dientes restantes trabajen en exceso y se dañen.
● Prevenir complicaciones mayores a futuro.
● Disfrutar de una sonrisa completa y natural.